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Ayudas para autónomos menores de 30 años

ayudas y bonificaciones autonomos menores de 30

2018-11-25 14:34:32

Los autónomos menores de 30 años cuentan con ayudas y una serie de ventajas a la hora de emprender su negocio. Eso sí, este colectivo necesita informarse bien para que el paso a ser emprendedor autónomo sea lo más asequible posible. 

Algo que debe tenerse en cuenta cuando se toma la decisión se empezar, es leer el Estatuto del Trabajador Autónomo y sus derechos y deberes
La legislación actual dice que ser autónomo menor de 30 años supone una reducción en el pago de las cuotas para el autónomo. 

Bonficaciones para los 12 primeros meses


En el Artículo 31 de la Ley 20/2007, de 11 de julio, del Estatuto del trabajo autónomo, queda claro que la cuota por contingencias comunes, incluida la incapacidad temporal de los trabajadores por cuenta propia, que se den de alta o no lo hubieran estado en los dos años inmediatamente anteriores, a contar desde la fecha de efectos de alta, en el Régimen de Autónomos, será reducida a la cuantía de 50 € al mes durante los 12 meses inmediatamente siguientes a la fecha en la que se den de alta. Todo ello en caso de que elijan cotizar por la base mínima que les corresponda.

Los trabajadores que por cuenta propia o por ser autónomos, opten, cumpliendo los requisitos anteriormente comentados, por una base de cotización superior a la mínima que les pueda corresponder, se pueden aplicar en los 12 primeros meses inmediatamente siguientes a la fecha de alta, una reducción del orden del 80 por ciento sobre la cuota por contingencias comunes.

Esto hace que, en los 12 primeros meses, el trabajador autónomo va a cotizar a la Seguridad Social unos 600€ en vez de los 3.300€ que ingresaría un autónomo que no cuente con estos beneficios en la cotización.

Bonificaciones tras el primer año de alta como autónomo


Después del periodo inicial de 12 meses que hemos dicho e independientemente de la base de cotización que se elija, los trabajadores autónomos que disfruten de la medida, pueden aplicarse una serie de reducciones o bonificaciones sobre la cuota por contingencias comunes.

Esto dará la cuota a reducir o bonificar una base mínima a la hora de cotizar que corresponderá con el tipo mínimo de cotización vigente en cada momento, estando incluida la incapacidad temporal hasta 12 meses, hasta el periodo máximo de 24 meses después de la fecha en que se haya producido el alta, en base a la escala siguiente:
 
  • Reducción equivalente al 50% de la cuota durante los 6 meses siguientes al periodo inicial previsto del que hablábamos al principio del artículo.
  • Reducción equivalente al 30% de la cuota en los 3 meses siguientes del anterior punto a
  • Bonificación equivalente al 30% de la cuota en los 3 meses siguientes al anterior punto b

La ley dice más, pues que en el supuesto de que los trabajadores sean menores de 30 años o menores de 35 si son mujeres, causen alta inicial y no hubieran estado en situación de alta en los dos años inmediatamente anteriores a la fecha de alta, se les podrán aplicar, además de las reducciones de las que hemos hablado antes, una bonificación adicional equivalente al 30% de la cuota por contingencias comunes en los 12 meses siguientes a que acabe el periodo de bonificación.  

En este supuesto, la duración máxima de reducciones y bonificaciones llegará a ser de 36 meses.


Resumiendo:


Un trabajador autónomo menor de 30 años o menor de 35 años si es mujer, va a cotizar en los 36 primeros meses de actividad de la siguiente forma:
  • Los primeros 12 meses a 50,00 € mensuales = 600,00 €.
  • 6 meses a 137,50 € mensuales = 825,00 €
  • 18 meses a 192,50 € mensuales = 3.465,00 €

Todo esto da un total en los 36 meses de 4.890,00 €. Para hacernos una idea, si el trabajador no tuviera beneficios de cotización, pagaría 9.900 €, lo que supondría una diferencia de 5010,00 €

Como podemos darnos cuenta, este tipo de ayudas a los emprendedores menores de 30 años en el caso de los hombres y de 35 años en el caso de las mujeres, vienen muy bien cuando se comienza el emprendimiento, pues suelen ser meses en los que suele haber más pérdidas que ganancias y la cuota de autónomos, supondría un obstáculo más a la hora de generar liquidez e ir haciéndose con la mecánica del negocio en cuestión.

La ayuda para autónomos es necesaria, pero todavía no ha sido suficiente para que los jóvenes, al contrario que ocurre en otros países, opten en mayor medida por el emprendimiento. Para ello quizá deban en el futuro aumentarse los periodos u otro tipo de medidas que colaboren a que el joven apueste por una idea de negocio con la viabilidad necesaria.

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